02 de enero de 2017
Hola Ari,
La verdad me dejaste sin palabras, necesito volver a leerte más desde un punto lógico que desde la emoción de los sucesos. Recuerdo que al pasar las páginas me sorprendía saber el gran parecido de nuestras personalidades, admito que lograste despertarme una gran nostalgia, los ojos se me inundaron y al final una gran emoción me atrapo.
Me pregunto si de verdad se puede ¿Amar a alguien sin saberlo?, eso está en mi mente, necesito una respuesta pronto… porque lo secretos empiezan a crecer más de lo que podemos aguantar, porque el tiempo viene, está corriendo y puede atraparme.
¿Por qué nos regimos por reglas?, ¿no es más fácil alzar el vuelo?, aunque hasta nuestros propios gustos a la hora de la verdad son reglas, impuestas por nosotros pero lo son. Mirar la vida de esa manera me deja conmocionada y sorprendida, las reglas en mi vida crecen y crecen, hay tantas que no logro recordarlas, pero de alguna manera estas reglas nos describen, nuestra lo que somos en realidad.
¿Por qué dejamos que otros manejen nuestra vida?, tal vez, solo tal vez, es más fácil para nosotros dejar que alguien con más experiencia se ocupe de que no cometamos errores, hay veces el miedo llega ser tan grande que nos convertimos en títeres de alguien más, ¿pero eso ya no sería vivir o sí?
Hay muchas reflexiones en mi mente, ¿Cómo sería la vida si tuviera una guía?, muy distinta tal vez, aunque perdería su magia. Si, tiene magia aquella que logra envolverte y al mirar a tu alrededor ves colores de un hermoso paisaje, se siente como si llenara lo más profundo de tu ser, claro ahora con las grandes ciudades, todo se está empezando a verse gris, ¿Qué hermoso puede ser eso?
Tengo que confesar que esa idea me aterra, Ari.
¿Ari?, tengo miedo Ari, siento que no pertenezco a esta sociedad.
Ari… gracias…
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